John Baines


Seudónimo literario adoptado por el chileno Darío Salas Sommer, nieto del gran educador Darío Salas Díaz. Hace tres décadas, fundó en Santiago de Chile el Instituto Filosófico Hermético, publicando en 1965 la primera de sus obras, Los Brujos Hablan.


Miembro desde 1988 de "The Authors Guild Inc.", sociedad de escritores de Nueva York, y su nombre aparece en el "Who is Who" de International Authors and Writers, publicado en Inglaterra (1999/2000). También es fundador y director del "Darío Salas Institute" de Nueva York, con filial en Rusia, una organización sin fines de lucro que promueve la capacitación y el desarrollo humano en sus más elevadas expresiones.

 

Es creador de la "Fundación Bolivariana Latinoamericana", con sede en Caracas, Venezuela, cuyo objetivo es el desarrollo cultural y humano de Latinoamérica para alcanzar una identidad común basada en principios morales y espirituales de primer orden. Fundó también el "John Baines Institute", Escuela de instrucción a distancia que imparte la filosofía Hermética para lograr una vida mejor. La casa central de esta institución se encuentra en los Estados Unidos, con filiales en Chile, Argentina y España.


Ha escrito varias Obras sobre Filosofía Hermética, a las que se les califica como "filosofía operativa" para destacar su lado práctico y transformador del ser humano. Dichas obras, traducidas a varios idiomas, son las siguientes:

  • Los Brujos Hablan

  • Depresión y Angustia

  • El Hombre Estelar

  • ¿Existe la Mujer?

  • El Desarrollo del Mundo Interno

  • La Ciencia del Amor

  • Hipsoconciencia

  • Moral para el Siglo XXI

En la actualidad, dedica su tiempo a impartir conferencias, y a dirigir las actividades del Instituto Filosófico Hermético y del "John Baines Institute".

 

Los Brujos Hablan
 

Del Capitulo ¿SER O NO SER?

 

"...ciertos seres que se encuentran en una escala evolutiva mucho más alta que el ser humano, verdaderos dioses del espacio, que se aprovechan del esfuerzo humano, pero que a la vez, cumplen ciertas funciones cósmicas, es decir, ocupan un importante puesto en la economía universal. Ya los hemos mencionado anteriormente llamándolos los Arcontes del destino. También podríamos referirnos a ellos como los Dioses del Zodíaco ya que son los que dirigen y regulan la existencia humana en este planeta...


Los Arcontes del destino son seres temibles, no porque sean malos, sino por su severidad fría e inexorable en la manipulación del sapiens (hombre)...


Estos jueces ocultos provocan, por ejemplo, sin piedad alguna en sus corazones, una guerra mundial en la cual mueren millones de personas. Para ellos estos difuntos no tienen más valor que el asignado por el sapiens a los miles de animales que sacrifica diariamente para alimentarse.


"El sapiens, en su lucha inclemente por la existencia, hace que su aparato emocional y nervioso elabore ciertos elementos incorpóreos, pero de una extraordinaria potencia, los cuales "abandonan" el cuerpo humano en forma de vibraciones que son emitidas por antenas incorporadas en su unidad biológica, las cuales se encuentran orientadas y sintonizadas con la frecuencia de los Arcontes, que así "cosechan" esta fuerza y la utilizan con fines que no divulgaremos; volviendo a advertir que, de todos modos, cumplen una función cósmica.


Es así como el sapiens es despojado inadvertidamente del producto más noble producido por él mismo, el destilado final de la experiencia humana... el "caldo aurífero" de su vida".


El sapiens debe nacer, sufrir, amar, gozar, reproducirse, construir civilizaciones, destruirlas, enfermar y morir, sólo para beneficio de potencias superiores invisibles, quienes capitalizan el "producto vital".


El sapiens es, por lo tanto, un esclavo a perpetuidad. No obstante, ejemplares individuales o aislados (segregados del grupo), pueden llegar a ser libres".